(Reuters) - Dos años después de que el gusano informático Stuxnet atacara su programa nuclear, Irán está recurriendo cada vez más a la ciberguerra en una creciente pero discreta confrontación con sus enemigos. Aunque la amenaza inmediata de un ataque militar israelí sobre sus instalaciones nucleares se ha calmado por ahora, las autoridades iraníes están presionadas por duras sanciones, una moneda que se derrumba, y un descontento popular en ascenso. ...

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